No solo se trata de plantar, también de mantener y cuidar esta joven reforestación. Para ello, aprovechando la soleada mañana del jueves 24 de abril, organizamos una nueva jornada de voluntariado en el marco de colaboración Cummins-Micorriza, enmarcado en el “Programa de conservación de ecosistemas ligados al agua en el Geoparque de la comarca de Molina-Alto Tajo”.

Esta vez, y dentro de las acciones programadas en el espacio del Geoparque Mundial UNESCO Molina-Alto Tajo, nos reunimos unas 25 personas para apoyar las plantaciones que ayudan a restaurar y regenerar el bosque de ribera del río Linares entre la Cueva de los Casares y la Riba de Saelices, aportando humus de lombriz a los más de 600 árboles y arbustos plantados, reparando además los protectores dañados debido a las fuertes crecidas de este invierno.

También aprovechamos para hacer un estaquillado de sauce, proveniente de un ejemplar singular situado en los alrededores, y que esperemos que contribuya a disminuir la erosión en una zona con riesgo de pérdida de suelo.

Para terminar la jornada, se llevó a cabo un taller en el río, que nos permitió conocer algo más sobre el estado y la importancia de la calidad de las aguas y su repercusión en la fauna y flora que pueblan este ecosistema. Culminamos la jornada con una rica comida de hermanamiento para recuperar fuerzas en el restaurante de La Riba de Saelices antes de regresar, ¡muy recomendó el menú de este establecimiento local!

Muchas gracias a todos los voluntarios, tanto de Cummins como de la Riba, que nos ayudaron a portar las sacas de humus hasta la zona de la plantación, por su trabajo, implicación, y buen ánimo en el desarrollo de esta jornada.

¡Manos a la azada!